Historia del Caney

La Historia del Caney 

       La historia de los pueblos trasciende, cuando se impacta a la comunidad en que se habita de forma positiva. Cumplir con el deber comunal de reconocer el esfuerzo, el orgullo de lo que nos representaron y lo más importante lo que representan; convertirse en valores a seguir e imitar para las generaciones presentes y venideras, es tarea de todos. El 31 de enero de 1990, emprendedores salinenses se dieron a la tarea de organizar el Caney de la Fama y del Deporte Salinense en nuestro pueblo, cumpliendo así con su deber comunal.

      El propósito primordial fue rescatar y enaltecer los meritos de aquellos compueblanos que se destacaron en el deporte, dando lustre y gloria a nuestra comarca del Abey. Levando la consigna de presentar a los héroes que forjaron la gloriosa historia deportiva salinense. El recuerdo y privilegio de conocer aquellos que fueron baluartes del deporte fue presentado y documentado por estos hombres y mujeres valientes, visionarios, apasionados, que dieron ese primer paso, los entusiastas fundadores del Caney. En el 2015, otro grupo de salinenses comprometidos con la cultura y el deporte de nuestro pueblo, tras un receso de trece años, hoy le damos la vida a lo que será el Caney de la Fama la Cultura y el Deporte Salinense.

    La cultura y el deporte de nuestro pueblo es una de mucha valor. La vida de los héroes del deporte y la cultura se prolonga en las palabras y la tinta. Las historias se visten con fechas y las fechas perduran en sus protagonistas. Tenemos una misión como pueblo, llevar el mensaje a las generaciones presentes y futuras tal y como lo hicieron los fundadores del Caney de la Fama y del Deporte Salinense hace veintiséis años. Este compromiso se consolida con la apertura del salón en el cual se expondrán y se preservarán los documentos rescatados, memorabilia y se recreará la gesta de cada inmortal del Caney. Estará ubicado en la escuela de Bellas Artes Santiago R. Palmer. Allí podrán rememorar, recordar y conocer a cada inmortal que dejó huellas e hilvanó nuestra gran histora deportiva y cultural. Vivir sus triunfos, sus éxitos sus esfuerzo, sus sacrificios. Llenarnos de emoción al ver plasmadas sus obras, su música, su poesía, su quehacer. La historia engrandece a los pueblos, conozcámosla, el amor por la cultura y el deporte de un pueblo es un vehicular innegable de hombres y mujeres ejemplares, valores de nuestra patria. El Caney era el bohío que se construía solo para el Cacique, así es en Salinas, lugar en el cual solo habitan los inmortales del Deporte y la Cultura Salinense.    

                                                                                                    Por:  Jossie Alvarado